viernes, 8 de enero de 2010

Los dueños de mi ciudad


Cuando el tono aspero y exigente del chofer publico me indico que me faltaban cinco pesos por pagar, senti como rapidamente se me subio la sangre a la cabeza, una avalancha de insultos se apresuro para salir de mi boca y aunque me costo mas de lo que puedo explicar, me contuve y reserve mis palabras para mis adentros, me limite a buscar los reclamados cinco pesos en mi monedero y se lo pase a uno de los tantos duenos de mi pais.
Si, porque en el pais en que vivo los choferes de transporte publico son propietarios sin papeles de cada pedazo de esta media isla, al menos eso ellos creen. Cuando se les antoja y sin ningun aviso paralizan todo, importandoles medio pepino la prisa de quienes necesitan llegar a tiempo a sus trabajos o los que van de regreso a sus hogares luego de una pesada faena.
La peor parte de sus protestas las llevamos los pasajeros quienes ademas de tener que pagar el precio que a ellos se les antoje establecer, tambien sufrimos las discusiones dentro de los vehiculos , insultos y humillaciones que me llenan de ira con tan solo recordarlos.
Hace un tiempecito atras (menos de cuatro anios ) cuando el pasaje bruscamente subio de diez a quince pesos, recuerdo que un senor se subio en un autobus y cuando ya estaba con los dos pies sobre el vehiculo le explico al cobrador que solo tenia diez pesos, este ni siquiera tuvo la delicadeza de pedirle al chofer que se detuviera, sino que con el bus en marcha empujo al pasajero y le grito una groseria que si la repito sentiria que me estoy ofendiendo a mi misma.
Por suerte el senor no rodo en el piso como lo hizo una mujer que para esos mismos dias le explico a otro cobrador en medio del camino que el dinero no le alcanzaba y que de favor le perdonara los cinco pesos restantes, en esa oportunidad el vehiculo si se detuvo pero el cobrador ademas de sacarla como si fuera una delincuente agarrada de un brazo, le lanzo un bulto con el que andaba en el medio de la calle, regando por todos lados las pertenencias de la pobre senora.
Estas cosas y mas las han visto mis ojos mientras voy rodando de aqui para alla en el maravilloso sistema de transporte publico de mi ciudad…
Cada peso que aumentan al pasaje me convierte en un ser mas pobre y si me duele a mi que no tengo hijos que mantener ni facturas que pagar a fin de mes, no me quiero imaginar quienes si lo hacen y ademas cuentan con un sueldo bastante limitado.Una vez mas mi voz no se escucha cuando grito que no es justo, que se debe buscar una solucion inteligente para que si suben los combustibles y hay que aumentar los pasajes minimo nos ahorremos las humillaciones y los atropellos. Para que nos transportemos en vehiculos mas decentes y comodos, para que el llegar a nuestros hogares o trabajos a tiempo no este en manos de un grupo de sinverguenzas que cada vez que se les ocurre arman un desorden que se ve recompensado por las condecendencias del gobierno.
Me enferman los atropellos, la falta de respeto, el comportamiento irracional de esas bestias difrazadas de hombres, eso, y no otra cosa es lo que mas me molesta de los aumentos del pasaje. Probablemente si lo hicieran sin pataletas y bulla, creo que seria mucho mas llevadero para mi desprenderme de cinco pesos mas de mi dinero.

Un dinero ganado sin tener que recurrir a sinverguencerias e insultos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario